Dejaré la sinopsis y la recomendación para otra ocasión, en este momento quiero compartir sobre la que sin duda ha sido la película que más ha dejado una huella en mi... "El Lado Oscuro del Corazón".
Alguna vez escuché decir de alguien "todo a su tiempo", y realmente tuvieron que pasar 15 años para que yo viera esta cinta. Desde hace mucho tiempo, al recorrer por el pasillo del cine de arte del Block..., me encontraba con ella y siempre me decía "para la otra la rento", creo que si la hubiera visto el día de su estreno, ó hace 10 años, ó hace 4 años, ó incluso ayer, tal vez no hubiera tenido el mismo significado que hoy.
Más allá de la trama, la cual es genial, me quedé enganchada con la compleja psicología del personaje principal, Oliverio, quien es un poeta bohemio, que está en la búsqueda de una mujer que sepa volar y que es acosado constantemente por la Muerte, con quien llega a sostener unos diálogos buenísimos.
La reflexión que me dejó esta joyita del séptimo arte es que cada día, hora, minuto, segundo de nuestra vida está inundada de represiones construidas principalmente por el miedo, el cual es generado por la misma sociedad, el gobierno y la iglesia. No nos atrevemos a salirnos de la línea, del paradigma establecido, por temor a ser juzgados, incluso por nosotros mismos. Negamos nuestro enojo, negamos nuestra frustración, negamos nuestra sexualidad (en toda la extensión de la palabra) y negamos nuestros propios deseos para no sentir angustia; sin embargo, en la lucha contra nuestros propios impulsos, resultamos perdedores: al enfermarnos, al repetir el conflicto, al sentirnos deprimidos, ó incluso al continuar negándolo.
Tal vez esto ya lo había visto durante los 5 años de facultad y 3 años de maestría, pero realmente me hizo más sentido al estar viendo la cinta, porque me di cuenta que la mayoría de nosotros no apreciamos realmente el arte, nunca equivaldríamos un poema por un billete de 200 pesos, en los anuncios de ocasión nunca se ha ofrecido el puesto de "escritor" ó de "pintor", es mejor estudiar para ingeniero que para actor, porque según se dice, las áreas de artes y humanidades no generan producto; por lo tanto qué importa que alguien acuda a terapia ó a una obra de teatro experimental, es mejor que abra una cuenta en equis banco.
Creo que si le permitiéramos al arte estar más presente en nuestras vidas, tendríamos menos ansiedades, porque seriamos capaces de crear, de expresar nuestras emociones de una forma adecuada, de fortalecer nuestras relaciones interpersonales, de sostener un diálogo con el otro sobre temas profundos, sobre nuestro mundo interno...y por qué no tener un diálogo con nosotros mismos en donde nos aventuráramos a realmente conocernos desde nuestros adentros....
En fin, más que una película es una obra maestra, un espejo en el cual nos reflejamos la mayoría de nosotros ó tal vez todos, pues ¿quién ha estado exento cuando se trata de asuntos del alma, de la dicotomía del propio ser, de la crisis existencial y de los conflictos del corazón?, agradezco que yo no, porque de lo contrario ¿estaría viva?...
Nota: Cabe mencionar que en la película abundan poemas de Mario Benedetti, de Oliverio Girondo y de Juan Gelman. Dichos poemas son evocados en textos ó imagenes y es a través de ellos en donde uno logra estar en comunión con las emociones de los personajes.
Un párrafo de El Espantapájaros 1 de Oliverio Girondo es la carta de presentación que utiliza el poeta bohemio al momento de "abordar" a una mujer y de alguna manera es la forma en como va limitando a aquellas que no sean capaces de volar:
"No sé, me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias ó como pasas de higo; un cutis de durazno ó de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco ó con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; ¡pero eso sí! y en esto soy irreductible, no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar. ¡Si no saben volar pierden el tiempo de estar conmigo!" (Girondo)
Otro poema, esta vez de Benedetti, que necesito compartir, se "recita" en una de las escenas más conmovedoras de la película:
"NO TE SALVES"
No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo
pero si
pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.
(Benedetti)
Título: El Lado Oscuro del Corazón
Dirección: Eliseo Subiela
Guión: Mario Benedetti, Juan Gelman, Oliverio Girondo (poemas)
Eliseo Subiela (guión)
Reparto: Darío Grandinetti, Sandra Ballesteros, Nacha Guevara, André Mélançon,
Jean Pierre Reguerraz, Mónica Galán, Inés Vernengo
Música: Mário Clavel, Osvaldo Montes, Chico Novarro, Fito Páez
Fotografía: Hugo Colace
Producción: Suzanne Dussault, Roger Frappier, Susana Serebrenik, Fernando Sokolowicz
4 comentarios:
Más que nada, a mí la película me hace reflexionar sobre el hecho de que siempre estamos añorando la comodidad como "lo ideal en la vida" y equivale a lo que tú comentas, tener un trabajo estable (que no sea relacionado con el arte) para ganar buen dinero...porque Oliverio en sus diálogos con la muerte, la muerte siempre le andaba buscando empleo de "Gerente de publicidad" o cosas así...que creo que bien se podría hacer una relación entre ser "Gerente de no sé qué..." y estar muerto...porque precisamente Olverio lucha contra eso y aunque se vea tentado por la muerte quiere vivir...pero para vivir, necesita sufrir al descubrir el lado oscuro de su corazón...que pues sí, creo verdaderamente que cuando más apreciamos la vida es cuando salimos de las adversidades y si todo es paz y tranquilidad, no apreciaríamos la vida igual...de hecho, creo que por la época y el lugar en el que vivimos, que no hay guerras, y nuestra vida no se ve amenazada (cuando menos no a ese grado), no la apreciamos lo suficiente...y por eso, no apreciamos el arte, porque preferimos la comodidad de nuestra vida cotidiana, (con nuestras cuestiones laborales, con nuestros chismes, nuestras películas procesadas y nuestra TV llena de programas huecos), a experimentar emociones verdaderas, íntimas, a "sentir", lo cual no siempre es placentero, pero equivale a "estar vivo".
Saluuud!!!...Diana, eres una persona admirable, libre de pensamiento y valiente, porque sólo alguien con valor puede aventurarse a realizar un viaje hacia dentro de si mismo y eso es lo que te ha hecho ser una mujer completa. Realmente es un orgullo que me consideres tu amiga. Tqm...
muy cierto lo que dice diana, y a decir verdad, creo que eso de estar encerrado dentro de una burbuja atómica de egos, es lo que nos cohibe de pensar libremente con la escencia del arte.
El amor a su México,
y mi Lila Downs
me han enterado
que buscaba esto
que dejo aquí para Usted:
http://rudalgo.blogspot.com/2008/10/lila-downs-azulao.html
Así amo a Lila:
http://liladownsenargentina.blogspot.com/
Así amo la literatura que intento:
http://necesaria.blogspot.com/
Le dejo además, un beso.
PD: He visto mucho arte de mi tierra en su blog. Ahora pasearé un poco por aquí. Gracias a Usted.
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